Las farmacias han emitido cancelaciones de última hora o han reprogramado las citas debido a que no hay vacunas disponibles.
Por Madison Muller / EL FINANCIERO
Los estadounidenses que buscan la última vacuna Covid están siendo rechazados en farmacias que no tienen suficientes vacunas, lo que hace que la primera semana de la nueva distribución de refuerzos tenga un comienzo accidentado.
La semana pasada, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) animaron a todos los estadounidenses a que partir de los 6 meses de edad reciban las nuevas vacunas actualizadas de Moderna Inc. y Pfizer Inc. formuladas para proteger frente a las nuevas cepas del virus.
Pero muchos de los que quieren seguir el consejo de los CDC se han encontrado con un obstáculo inesperado: en algunas farmacias todavía no hay vacunas disponibles.
Un portavoz de Rite Aid dijo que los fabricantes están experimentando retrasos en el envío. CVS Health Inc. y Walgreens Boots Alliance también afirmaron que algunas tiendas aún no han recibido las vacunas.
Residentes de todo Estados Unidos han acudido a las redes sociales para expresar su frustración, ya que las farmacias han emitido cancelaciones de última hora o han reprogramado las citas para cuando se espera que haya existencias.
Cynthia Cox, vicepresidenta de KFF, dijo en Twitter que en ninguna de las farmacias de la red que cubre su seguro había existencias de la vacuna. Otros usuarios denunciaron que habían concertado citas en CVS o Walgreens, pero que las habían cancelado por falta de suministro.
Las farmacias indicaron que esperaban disponer de más citas a medida que aumente el suministro, pero no dieron detalles sobre cuántas tiendas o citas se habían visto afectadas.
“Este despliegue parece especialmente complicado porque ahora son las farmacias las que se encargan de comprar las vacunas (a diferencia del suministro gubernamental)”, aseveró Andie Pivarunas, directora de asuntos públicos de la Asociación Nacional de Farmacéuticos Comunitarios. Sin embargo, añadió, cierto retraso es normal cuando se lanza una nueva vacuna.
Las clínicas de salud locales que esperaban recibir vacunas también han tenido que cancelar citas debido a la falta de suministros. El Departamento de Salud del Condado de Carver en Minnesota dijo que tuvo que cancelar una clínica de vacunas programada para el martes. Las fechas futuras sólo incluyen la fórmula de Moderna como opción. Otra clínica en Missouri dijo que tuvo que cancelar todas las citas de vacunación porque las vacunas probablemente no llegarán hasta octubre.
Moderna y Pfizer comenzaron a enviar dosis de vacunas a mayoristas y minoristas inmediatamente después de la autorización. Un portavoz de Moderna dijo que ya habían enviado millones de dosis a las farmacias y que los envíos llegaban a diario.
“Esperamos que esté ampliamente disponible en farmacias y oficinas de prescriptores en todo Estados Unidos, incluidos los lugares en los que actualmente puede no estar disponible”, dijo Jerica Pitts, portavoz de Pfizer, en un comunicado. “Las personas aseguradas seguirán recibiendo la vacuna cuando su farmacia o prescriptor local tenga suministro de la vacuna”.
Pfizer dijo que no se enfrenta a una escasez de su vacuna. Ninguna de las dos empresas pudo explicar por qué se están produciendo los problemas de suministro.
“Ahora enviamos la vacuna a los distribuidores, y ellos la suministran a las farmacias y otros puntos de atención”, dijo Chris Ridley, portavoz de Moderna.
Los problemas de suministro no son necesariamente el resultado de una gran demanda, como se vio al principio de la pandemia. Pfizer sólo prevé que el 24% de los estadounidenses que reúnen los requisitos necesarios reciban su nuevo refuerzo, una cifra ligeramente superior al 17% de la temporada pasada. Pero esta vez hay nuevas variables en juego.
Antes de que la emergencia de salud pública por Covid finalizara en mayo, el gobierno de Estados Unidos pagaba las vacunas y las asignaba a los estados, lo que básicamente agilizaba el proceso. Ahora, consumidores, minoristas, distribuidores y aseguradoras se enfrentan por primera vez al despliegue de refuerzos en el mercado comercial.
“Siempre se previó que los fabricantes, distribuidores y mayoristas farmacéuticos podrían tardar varias semanas en enviar los pedidos iniciales y posteriores de los proveedores”, dijo Logan Anderson, portavoz del Departamento de Salud de Virginia.
Muchas farmacias, sin embargo, empezaron a ofrecer citas de refuerzo en cuanto los CDC dieron luz verde a las nuevas vacunas la semana pasada. Preveían tenerlas disponibles en cuestión de días.